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DEFINIENDO EL AMOR
El amor es un concepto difícil de aprehender. Numerosos artistas se han preguntado por sus entresijos y se han visto empujados a plasmar en poesía y música este sentimiento universal. Este sentimiento, que pasa a jugar un rol central en las artes del Renacimiento y Barroco, es fuente de placer pero también de dolor e incluso de locura para aquel que lo siente, tal y como explica Francisco de Quevedo en el soneto que da nombre a nuestro programa, “Definiendo el Amor”.
Nuestra propuesta trata de ofrecer una perspectiva de todas las facetas del amor a través de dos siglos de música antigua y de obras de autores de diversas nacionalidades. Cada bloque del programa está articulado a través de los versos del poema, ofreciendo así una progresión en paralelo. Así, presentamos el amor como una herida dolorosa y placentera a la vez; como un estado enfermizo que el enamorado no quiere abandonar; en definitiva, como un sentimiento contradictorio y brutal.
En adición a autores bien conocidos del repertorio barroco y renacentista, como Claudio Monteverdi o Girolamo Frescobaldi, hemos decidido ofrecer al público el descubrimiento de un repertorio que se escucha menos hoy en día. Este es el caso de las canciones españolas de Mateo Romero o Joseph Gaz, pero también la música del francés Claude Le Jeune o el italiano Carlo Gesualdo, de gran osadía armónica y cromática. Además, hemos incluido obras para clavecín solo de François Couperin con tal de ilustrar el plácido sueño de un niño, arrullado por su madre (“el Amor en la Cuna”), pero también las flechas de Cupido, que pueden llegar a matar a aquél quien cae en las redes del amor.
DEFINIENDO EL AMOR
Es hielo abrasador, es fuego helado,
es herida que duele y no se siente
es un soñado bien, un mal presente,
es un breve descanso muy cansado.
Es un descuido que nos da cuidado,
un cobarde con nombre de valiente,
un andar solitario entre la gente,
un amar solamente ser amado.
Es una libertad encarcelada,
que dura hasta el postrero paroxismo;
enfermedad que crece si es curada.
Éste es el niño Amor, éste es su abismo.
¿Mirad cuál amistad tendrá con nada
el que en todo es contrario de sí mismo!